Bueno… he tenido unos días ocupados y además he estado un poco pachucho (fiebre y viruses malos n_n) por ese motivo he tardado tanto en colgar la continuación del relato. Pero como lo prometido es deuda, por fin, posteo la continuación.
Como de costumbre, las debidas aclaraciones:
1) Esto sigue de esto :)
2) El clásico… En capítulos anteriores: Una vampiresa (cuyo nombre desconocemos) se zampa a una joven ucraniana. Muy lejos, en New York, un gigoló/pintor (curiosamente tb desconocemos su nombre) es “traicionado” por una “amiga” y decide que, importándole un huevo lo que le digan, acudirá a una fiesta a la que no ha sido invitado. Al día siguiente, Lara acude en el lugar de su amiga Sam a la buhardilla del pintor/gigoló para posar (si es que… n_n). Total, que chico conoce chica.
Llega la noche del veintiuno. Nos presentan a un nuevo y misterioso personaje, el sr. Thomas Fulton. El enigmático anciano se carga a un profe en Roma y habla de un cuadro. En la fiesta de navidad del veintiuno, Evelyn descubre al pintor entre la peña… se cabrea y va en su búsqueda. La trama continua…
3) Como siempre estoy ilusionado con la continuación n_n Empiezan a unirse algunos cabos (un poquito n_n) y claro, nuevas dudas…
Espero que os guste n_n
-Discúlpame Alan.
La abogada cogió una copa de Krug cuando pasó junto a uno de los camareros y saludó con un leve movimiento de cabeza a Damien Hirst al tiempo que se cruzaba con Catherine Einsner.
-Hola Bill –dijo sin mirar al pintor.
-Hola Evelyn. Estás radiante.
-Eres todo un truhán Bill. Te han sentado bien las nuevas adquisiciones –bromeó-. ¿Y tu amigo?
-¡Oh, perdona! Él es… -lo miró avergonzado- discúlpame soy un desastre con los nombres.
-Tranquilo Bill, Evelyn está de broma. Sabe perfectamente como me llamo. ¿No es verdad?
-Sí. Perfectamente.
-¡Oh!, os conocéis –confirmó el asesor financiero con afectada sinceridad-. Le estaba comentando lo importante que son las nuevas caras. Sin ir más lejos Hauser & Wirth apuestan por el arte indio del que podría ser el nuevo Hirst.
-Justo de él quería hablarte –le cortó Evelyn-. Acabo de cruzarme con Damien y me ha preguntado por ti.
-Vaya… ¿Por mí?
-Tranquilo. Lo entendemos.
-Claro, claro. Si me perdonáis.
Como una exhalación Bill Sullivan se deslizó entre los presentes obnubilado por su enorme ego.
El pintor y la abogada se alejaron entonces de la cacofonía del gran salón para enfrentarse, en el recibidor del hotel y cara a cara, a la falta de palabras.
-Hoy ha sido un día de mierda –anunció la abogada-. Lo último que quería era verte aquí.
-Tranquilízate. No he venido a joderte la noche.
-¿Cómo has entrado?
Antes de que el pintor pudiese abrir la boca una voz áspera y profunda le interrumpió con la mentira por presentación.
-Es mi invitado –afirmó el hombre al que ninguno de los dos había prestado atención.
Un anciano de esbelta figura y ojos acusadores ladeó la cabeza a modo de saludo.
-Ya pensaba que nunca la iba a conocer –continuó el desconocido-. Usted debe de ser Evelyn.
>>Yo soy Thomas Fulton.
-Encantada –alcanzó a decir la abogada.
-Igualmente.
>>Parece un poco sorprendida. Pero no debe preocuparse. ¿O tal vez tema que su affaire salga a la luz?
La abogada hizo un esfuerzo por mantener la compostura.
-No sé a qué viene todo esto –aseguró volviéndose hacia el pintor-, pero pensaba que podía confiar en ti. No imaginaba que eras uno de esos que va contando por ahí sus hazañas de cama.
-Te equivocabas.
-Sí. Ya veo.
Evelyn, tan llena de dudas y miedos como sólo un mentiroso puede tener, se giró airada y, sin mediar palabra, se dirigió al ascensor con paso decidido.
Ya a solas el pintor hizo el ademán de hablar pero el anciano se le adelantó.
-Perdone mi falta de tacto.
-Me ha hecho mentir. Ni soy de esos que van contando sus conquistas, ni le conozco de nada.
>>¿Quién coño es usted? Y ¿cómo sabía lo mío con Evelyn?
-Me llamo Thomas Fulton, y sé mucho de usted.
-Siga…
El misterioso desconocido sacó un móvil de última generación del bolsillo interior de su americana y le mostró una imagen.
-¿Lo reconoce?
El pintor dudó.
-No.
-¿Está seguro?
-Sí. Y será mejor que vaya al grano porque mi paciencia tiene un límite.
-Por supuesto. Hace cosa de un año adquirí este cuadro en Roma, a un profesor de la Universidad de La Sapienza.
>>Creo que usted lo pintó.
-Se equivoca.
El anciano deslizó su huesudo dedo por la pantalla táctil del móvil.
-¿Y éste?
Otro paisaje nevado apareció en la pantalla.
-Sí –afirmó el pintor-. Ese es mío.
-Fíjese en el trazo de las pinceladas, en la forma de utilizar el color, en como juega con las texturas. Incluso la letra de ambas firmas es idéntica.
-Le repito que yo no he pintado el otro cuadro.
>>No sé de dónde ha sacado la foto del mío, el segundo –enfatizó-, pero no sé nada del otro.
-Le ruego que me disculpe. Debo estar en un error. No pretendía molestarlo, pensé que le echaba una mano con Evelyn.
-Quiere dejar de hablar de Evelyn como si la conociese… ¿qué es esto? Algún tipo de timo.
>>¿Pretende chantajearme?
-No. Claro que no.
-¿Entonces?
El anciano suspiró como si no encontrase el modo de afrontar la conversación.
-Mi mandante está muy interesada en su trabajo.
-¿Su mandante?
>>Mire, no sé de qué me está hablando. No entiendo su modo de proceder. No me parece razonable su intromisión en mi vida, con Evelyn… con todo.
>>No quiero ser grosero, aunque ganas no me faltan. Así que si me disculpa, regresaré a esa fiesta a la que usted no me ha invitado e intentaré sacarle el máximo partido.
El pintor se encaró al ascensor dándole la espalda.
-Pinta paisajes nevados de lugares que nunca ha visitado… y siente añoranza.
>>¿Nunca se ha preguntado el porqué?
Noche del veintiuno, New Jersey.
-Mama... –Susurró Lara rompiendo el silencio-. Mama... –Repitió más alto.
Se acurrucó tapándose con la manta hasta los ojos aunque sentía calor. Mirando a la oscuridad mientras buscaba con la mano al señor Legs, su osito de peluche. Tal vez se había caído al suelo. Pero le daba mucho miedo sacar los brazos fuera de la cama, y más aún palpar el suelo. Quizás el señor Legs también estuviese asustado, como ella. Sería sólo un momento, apretó los dientes y se abalanzó hacía el borde de la cama. Allí estaba, paralizado por el temor. Lo cogió de una de sus patas aterciopeladas y volvió a acurrucarse hecha un ovillo, tapada por completo y abrazada al señor Legs. Con los ojos cerrados y los puñitos aferrados al peluche.
No se oía nada. Cuando Lara tenía mucho miedo se escondía debajo de las sábanas con el señor Legs. Pero era peor porque tarde o temprano tenía que salir y encontrarse con la oscuridad. Normalmente esperaba a que su madre encendiese la luz de la habitación para destaparse. Esa noche tardaba mucho, a lo mejor no la había oído.
Respiró hondo y se abrazó con más fuerza al señor Legs y apretó los párpados hasta que se dibujó en su carita la misma mueca que al probar las coles de brusela. Reunió valor.
-¡Mamaaaa! –Gritó con todas sus fuerzas. Después no se movió ni un ápice, acurrucada, tapada y a punto de llorar.
Pero no obtuvo respuesta, sólo el llanto de su hermana pequeña en la habitación contigua.
No podría aguantar mucho más debajo de las sabanas, el calor se hacía cada vez más insoportable. Pero sentía tanto miedo. Imaginaba sin querer temores oscuros. Alguien sentado en su cama mirándola fijamente, a veces lejos, a veces tan cerca que si no fuese imaginado podría notar su aliento. Imaginaba seres debajo de la cama que esperaban que su pierna se descolgara para agarrársela con fiereza. O a alguien escondido en el espacio que quedaba entre el tocador y el armario, a veces casi podía distinguir una sombra que se movía. Pero hacía tanto calor. Ya no podía aguantar más, no pasaría nada. No había monstruos escondidos en las sombras o debajo de la cama, sólo su imaginación. Se destaparía de golpe y nada le ocurriría.
Cogió al señor Legs con la mano izquierda y lo apretó contra el pecho. Luego agarró un jirón de ropa con la derecha preparándose para un movimiento rápido que la dejaría indefensa. Respiró una bocanada de aire caliente y se destapó por completo.
Nada... sólo oscuridad.
Respiró aliviada. El señor Legs también lo hizo. Por debajo de la puerta entraba luz. Sus gritos seguro que habían despertado a su madre, incluso su padre que tenía un sueño profundo y pesado se habría despertado. Pero la puerta seguía cerrada.
Esperó, mirando el pomo y de vez en cuando dando un vistazo rápido a su alrededor para asegurarse que ya no tenía miedo. El señor Legs se impacientaba pero Lara aún podía esperar un poco más. Su hermanita había dejado de llorar. Todo estaba de nuevo en silencio. Quizás no había gritado tan fuerte, a lo mejor nadie la había oído. Ahora le daba vergüenza llamar a su mamá porque ya casi no tenía miedo, sólo calor.
La noche del veintiuno del año pasado, del presente y de hace doce navidades… A veces el destino nos depara sorpresas que sólo comprendemos con el paso del tiempo.
Genial... habrá más no? XDD
ResponderEliminarLo sé, es frustrante echarte una parrafada escribiendo para que te pidan más, pero... hay más no? XDD
Besazos y mejorate prontito!!
Y otra vez, has sabido mantener la intriga hasta el último momento. Pensé que con ésta entrada mi curiosidad se vería saciada, pero el remedio resultó ser más mortífero que la enfermedad. ^^
ResponderEliminar¡Es genial, tanto tu forma de escribir como el transcurso de la trama merecen un excelente!
Gracias por escribir. ^^
Namarië.
Me ha sobrecogido la fidelidad con que describes los pensamientos infantiles, puede que yo nunca tuviera un osito pero recuerdo muy bien la amenaza oculta mas alla del borde de la cama. Un gran relato sin lugar a dudas. Nos vemos!
ResponderEliminarTita Hellen:
ResponderEliminarHola
Claro que habrá más n_n Esto es sólo el inicio...
La historia tiene mucho de su desarrollo terminado, en mi cabeza -_-U, el problema es traspasar las ideas al papel (u ordenador XDDD). Ojalá tuviese más tiempo para hacerlo n_n pero me gusta ver como esas ideas, poquito a poquito, van tomando forma.
Y me encanta que os guste el resultado... muchísimo n_n Me hace muy feliz (que ñoño ha sonado eso XDDD)
Besazos.
Hasta pronto.
Lunnaris:
Hola
*-*
¡¡¡Muchas gracias!!!
Me alegro de poder mantener la intriga n_n
A cada trocito que cuelgo la trama queda más definida.
Como le comento a Tita Hellen, vuestro apoyo es muu importante. Muchas gracias por leer mi relato y los ánimos n_n
Y gracias por comentar ;)
Hasta pronto.
Felix MMV:
ResponderEliminarHola
Esa era mi intención... que el lector pudiese sentir la diferencia entre el recuerdo de una niña y el presente de los adultos n_n
Me alegro que te guste. ¡¡¡Mucho!!! *-*
Muchas gracias por el tiempo y el interés n_n
Te leo.
Hasta pronto.
Genial. Cómo a lo que me tienes acostumbrado vaya. Me encanta además la puesta en escena del señor Fulton, el cual parece tener no calado, sino supervigilado al pintor.
ResponderEliminarAsí mismo dudo que Eve se quede tan tranquila con lo sucedido...
¿Qué pasará?
Un saludo!!!
Hola
ResponderEliminar¡¡¡Muchas gracias!!! n_n Pedazo halago...
El señor Fulton tiene tela... ya vereis poquito a poco pero vamos que hay mucho personaje que tiene delito en mi relato... pero todo a su debido momento n_n
Me alegro que te guste. Gracias por sacar tiempo para leer los kilométricos post de relato y comentar, que siempre me gusta :)
Y mañana, sin falta, te mando el post de derecho ;)
Hasta pronto. Una vez más gracias.
Otro pachucho… estamos cayendo todos, ¿eh? Bueeeno, bueno, no te preocupes, tírate al suelo y si te levantas antes de 5 segundos, no tendrás ni un solo virus ^^ (alguna aplicación tiene que tener la regla, alguna tiene que tener…>.<)
ResponderEliminar“Lo peor es cuando acabas un capítulo y la máquina de escribir no aplaude” (Orson Welles)
Como dice Hellen, debe de ser fastidiado que te curres un capítulo y los lectores nunca tengamos suficiente y te pidamos más… pero esa es la prueba de que la historia sigue emocionante ^^
Que sepas que te odio, SIEMPRE me dejas a medias (¡tu tum tum pas! xD)
Como siempre te digo, las conversaciones quedan realistas y creíbles. Me ha dejado a cuadros el hecho de que uno de los dos cuadros no sea del pintor pero el estilo de pintura sea el mismo, y que pinte paisajes en los que teóricamente nunca ha estado, y al verlos sienta como si los conociera… Qué perdida me has dejado ^^U (¿paradoja temporal? ¿reencarnación? ¿vampirismo? ¡Esto es un sinvivir! ¡¡Escribe, escribe, escribeeee!! ¡El Pueblo quiere saber!)
También muy realista la versión peque de Lara con el señor Legs… Cualquier niño (y no tan niño) piensa que sus peluches tienen su personalidad y comparten sus angustias y sus calores… El pobre señor Legs tenía que tener mucho miedo en el suelo, viendo en primera fila al monstruo de debajo de la cama ;p
Por lo de la carta, puedes escribirme a goblinoide87@yahoo.es, así te puedo dar por mail mi dirección de correo… Y repito que esto clama venganza :P
Un abrachucho ^^
Hola
ResponderEliminarXDDD Buen plan para acabar con los virus… si funciona, cuando pronuncies el discurso en Estocolmo no olvides nombrarme XDDD
*-* Me pongo colorado. ¡¡¡Muchísimas gracias por los halagos!!! Un besazo n_n
Palabra que sigo escribiendo… ojalá tuviese más tiempo y fuese más rápido -_-U De verás, tener el “cuento” en la cabeza y ser tan lento en el proceso de plasmarlo es un rollo. Aunque me gusta ese proceso (ya sé que es una contradicción... n_n).
Con tus preguntitas me cuesta al límite no hacer un spoiler (estoy ansioso por seguir narrando la historia)… pero entonces perdería la gracia. Cada papum a su debido momento n_n
Como siempre… escribo, escribo, escribo :)
Y una vez más, muchas gracias por el tiempo y el interés n_n
Tus comentarios extra-largos me encantan. Además, así mi comentario contestación kilométrico tiene una razón de ser XDDD
Ahora te escribo n_n y que sucederá… ¿tendré que mirar hacia atrás siempre que camine por un callejón temiendo la venganza de Goblinoide? Correré el riesgo ;)
Un abrachucho n_n
Hola River
ResponderEliminarSiento mucho haber tardado en escribirte la crítica. El que espero que sea mi último año de carrera se me está haciendo un poco cuesta arriba y llego muy tarde a casa todos los días (¡estoy liadísima con tanto parcial, laboratorio y trabajos!). Que sepas que te tengo en mi Reader y estoy al tanto de tus novedades, aunque tarde en comentarte ^_^
Mi crítica:
Me ha resultado rara una preposición de esta frase (justo al principio): "...movimiento de cabeza a Damien Hirst al tiempo que se cruzaba, y evitaba, con Catherine Einsner." ¿No sería "a"? No me suena bien porque cruzar va con "con", pero evitar va con "a". No sé cuál es la preposición correcta en este caso, así que creo que lo mejor sería modificar la frase y escribir "cruzar con" y "evitar a" por separado. No sé si me he explicado bien.
También hay algo raro en este fragmento, en la parte final:
"... de que el pintor pudiese abrir la boca una voz áspera y profunda le interrumpió con la mentira por presentación." Un poco rebuscado para mi gusto.
Y eso es todo lo que puedo corregir. El resto estupendo. Me ha gustado el nombre del peluche de la niña y creo que la historia del pintor se ha quedado de lo más interesante...
Un beso :)
Hola
ResponderEliminarNo hacen falta las disculpas n_n Sólo faltaría que además de pedirte consejo te pidiese celeridad. Tarda tanto como quieras, tu opinión bien merece la espera ;)
Y ánimos con ese último año ;)
Al asunto n_n
A mí tb me chirriaba esa parte así que con dos opiniones en contra es suficiente para cambiarlo. Cuando cuelgue este comentario lo soluciono… o eso espero XDDD
Respecto este fragmento:
"... de que el pintor pudiese abrir la boca una voz áspera y profunda le interrumpió con la mentira por presentación." Comentas que es rebuscado… pues un poquito XDDD
Supongo que ahí salió mi vena Lovecraft que te comenté dormitaba en mi interior XDDD Pero en este caso me gusta… y tiene (además) una explicación que todavía no quiero desvelar n_n
Me encanta que te parezca interesante n_n Siempre anima ;)
Muchas gracias (muchas, muchas n_n) por tu tiempo y dedicación.
Un beso ^^
Hasta pronto.